Mujeres de 40 y más

Comprar ropa ha dejado de ser una de mis actividades favoritas……¿Por qué?.... considero que los espejos de las tiendas son muy malos vendedores, pues cada vez que entro en el vestidor me doy cuenta de lo mal que voy vestida, (el espejo de la casa mostraba una imagen más benévola) , el siguiente problema surge cuando empiezo a probarme la ropa, aunque todavía sigo usando la misma talla de hace años, absolutamente nada de lo que me pruebo me gusta como se me ve me faltan “pompas” - ¿Dónde las deje?, antes me acompañaban a todos lados- las “bubis” aunque pequeñas no están en su sitio, aunque continuo delgada mi vientre ya no me gusta lo veo sin chiste y poco sexi…..no cabe duda los espejos de las tiendas me odian y solo resaltan mis defectos.
Todo esto me hace recordar a mi mamá y sus visitas a las tiendas de ropa para comprarse atuendos nuevos, era toda una querella: - “que gorda estoy”, 2que vieja me veo”, “se me sale esto, se me sale aquello”- . Y yo la escuchaba con impaciencia ¿Qué esperaba mamá? Era una mujer de cuarenta y tantos y lucia como tal, aunque para los demás adultos pareciera de menor edad. Hoy treinta años más tarde por fin comprendo su frustración, sus miedos y el aferrarse un cuerpo firme y joven, el aprender a lidiar con este nuevo yo, maduro y experimentado, aprender a amarlo y a cuidarlo para descubrir su nueva belleza.