Inicié el ciclo escolar con una poca inquietud: después de muchos años regresaba a trabajar con los primeros años y no con un grupo, como en años anteriores, ahora trabajaría con los 6 grupos.
Puse toda mi buena voluntad a su servicio e iniciamos el trabajo. A mitad de año me doy cuenta que es lo mejor que me ha pasado, ya había olvidado la ternura y disposición de los niños de 12 y 13 años. No cambiaría por nada el ser la maestra de estas personitas que me tienen maravillada y que cada día me asombran con sus ocurrencias.
1º A
Mis niños del “A” como les digo; son en su mayoría un manojo de educación y buenos modales, cumplidos con sus deberes y les gusta competir entre ellos para dejar claro quién es el mejor.
Como dato curioso, las dos únicas niñas de los primeros años llamadas Lily, se encuentran en este grupo, al igual que las dos únicas Abigail. Es el único grupo donde la mayoría cumple con las tareas, esto es solo una o dos personas no la hicieron. Cuestionan poco e incorporan con facilidad las normas escolares. Marianita viene de Chihuahua y es muy formal, desempeña el papel de jefe de grupo y eso le ha conseguido antipatías por parte de sus compañeros. Una de las Abigail es aplicada, cumplida y siempre tiene para regalarte una sonrisa.
En fin, es un grupo con el que disfrutas trabajar y sabes que ellos siempre están en la buena disposición de aprender más.
jueves, 18 de febrero de 2010
martes, 16 de febrero de 2010
Los huehues
Los huehues son hombres que se disfrazan de ancianos, usan mascaras y ropas vistosas, sus capas son de colores encendidos y con lentejuela que brilla al ser tocada por el sol. En estos festejos las mujeres no toman parte y es por eso que algunos hombres se visten de mujeres.
Con sus bailes se despiden del desenfreno para iniciar la cuaresma.
Aquí en Puebla es una tradición ir a verlos bailar, los principales barrios de la ciudad y juntas auxiliares tienen sus cuadrillas de huehues y las personas se reúnen a su alrededor para acompañarlos n sus bailes o simplemente para disfrutar de su música, sus bailes y sus colores.
Debo confesar que a mí me dan miedo, de pequeña mi papá nos llevaba a verlos bailar y nunca disfrute esos paseos; siempre fui testigo de acciones poco gratas de su parte, generalmente habían tomado y se encontraban ebrios, eso les permitía envalentonarse y retar a los espectadores o faltarle al respeto a las mujeres que observaban sus bailes, también me toco ver como exigían dinero a cambio de sus bailes y a punta de pistola o escopeta te amedrentaban para conseguir su objetivo.
Ya siendo adulta uno de mis alumnos fue quemado de un escopetazo en su cara cuando salió de su casa para ver bailar a los huehues. Sus quemaduras fueron de tercer grado y casi le costaron la vida. Nunca supieron quien fue el agresor, pues se escondió cobardemente bajo su disfraz.
Hoy vivo en un pequeño pueblo cercano a la ciudad y el inicio de carnaval ha sido enmarcado por el baile, la música y el color de los huehues, afortunadamente desde la ventana de mi casa puedo apreciar el espectáculo sin la necesidad de acercarme a ellos, porque es un miedo que aún no puedo superar.
Con sus bailes se despiden del desenfreno para iniciar la cuaresma.
Aquí en Puebla es una tradición ir a verlos bailar, los principales barrios de la ciudad y juntas auxiliares tienen sus cuadrillas de huehues y las personas se reúnen a su alrededor para acompañarlos n sus bailes o simplemente para disfrutar de su música, sus bailes y sus colores.
Debo confesar que a mí me dan miedo, de pequeña mi papá nos llevaba a verlos bailar y nunca disfrute esos paseos; siempre fui testigo de acciones poco gratas de su parte, generalmente habían tomado y se encontraban ebrios, eso les permitía envalentonarse y retar a los espectadores o faltarle al respeto a las mujeres que observaban sus bailes, también me toco ver como exigían dinero a cambio de sus bailes y a punta de pistola o escopeta te amedrentaban para conseguir su objetivo.
Ya siendo adulta uno de mis alumnos fue quemado de un escopetazo en su cara cuando salió de su casa para ver bailar a los huehues. Sus quemaduras fueron de tercer grado y casi le costaron la vida. Nunca supieron quien fue el agresor, pues se escondió cobardemente bajo su disfraz.
Hoy vivo en un pequeño pueblo cercano a la ciudad y el inicio de carnaval ha sido enmarcado por el baile, la música y el color de los huehues, afortunadamente desde la ventana de mi casa puedo apreciar el espectáculo sin la necesidad de acercarme a ellos, porque es un miedo que aún no puedo superar.
domingo, 14 de febrero de 2010
14 de Febrero
14 de Febrero
En México se festeja este día el “Día del amor y la amistad” y confieso que durante muchos años fui enemiga de esta celebración, que no es más que producto de los comerciantes ante un mes de tan poco consumo como lo es febrero.
Pero, después de algunos años debo admitir que ya no me molesta la fecha, es más hasta me pone nostálgica (debe ser la edad), y admito solemnemente que no hay nada más desinteresado que felicitar a tu amigo y que tener un pretexto para celebrar tu amor; después de caminar un rato por esta vida he aprendido a ser amiga y a recibir amistad, se que los amigos están contigo sin que los llames y que no importa el cómo se inicio una amistad sino el tiempo que la has conservado, he aprendido que los amigos pueden estar contigo todos los días o solo verlos de vez en cuando o que quizás nunca los veas pero estas siempre para ellos y ellos para ti.
¿Y qué decir con respecto al amor?.......que es digno de festejarse un día y que como todas las cosas buenas se deberían de festejar a diario, pero a veces el trabajo, los compromisos y la rutina son pretextos fieles para dejar a un lado la celebración. Entonces hacer un alto en el camino para festejar el amor vale la pena; ese amor que 365 días al año despierta a tu lado con una sonrisa, con una esperanza y con una promesa, ese amor que durante 23 años o más te ha acompañado, te ha dado libertad, nuevos sueños, te da la mano para que te sostengas de manera tan sutil que apenas o notas, ese amor que no considera un trabajo enamorarte cada día, ese amor que sabe despertar tu pasión, que es tu confidente, tu amigo y compañero y que es lo primero y lo último en tu día.
Entonces después de varios años, me gusta el día del amor y la amistad, como un homenaje a todos mis amigos y amigas y al hombre que me enamora todos los días.
En México se festeja este día el “Día del amor y la amistad” y confieso que durante muchos años fui enemiga de esta celebración, que no es más que producto de los comerciantes ante un mes de tan poco consumo como lo es febrero.
Pero, después de algunos años debo admitir que ya no me molesta la fecha, es más hasta me pone nostálgica (debe ser la edad), y admito solemnemente que no hay nada más desinteresado que felicitar a tu amigo y que tener un pretexto para celebrar tu amor; después de caminar un rato por esta vida he aprendido a ser amiga y a recibir amistad, se que los amigos están contigo sin que los llames y que no importa el cómo se inicio una amistad sino el tiempo que la has conservado, he aprendido que los amigos pueden estar contigo todos los días o solo verlos de vez en cuando o que quizás nunca los veas pero estas siempre para ellos y ellos para ti.
¿Y qué decir con respecto al amor?.......que es digno de festejarse un día y que como todas las cosas buenas se deberían de festejar a diario, pero a veces el trabajo, los compromisos y la rutina son pretextos fieles para dejar a un lado la celebración. Entonces hacer un alto en el camino para festejar el amor vale la pena; ese amor que 365 días al año despierta a tu lado con una sonrisa, con una esperanza y con una promesa, ese amor que durante 23 años o más te ha acompañado, te ha dado libertad, nuevos sueños, te da la mano para que te sostengas de manera tan sutil que apenas o notas, ese amor que no considera un trabajo enamorarte cada día, ese amor que sabe despertar tu pasión, que es tu confidente, tu amigo y compañero y que es lo primero y lo último en tu día.
Entonces después de varios años, me gusta el día del amor y la amistad, como un homenaje a todos mis amigos y amigas y al hombre que me enamora todos los días.
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